Por Loom “El Maldito Chino” ¿Quién está detrás de todas las arbitrariedades que se están cometiendo en la ciudad?, se preguntaron los comerciantes del Centro Histórico, quienes se manifestaron en contra de las obras que se están realizando por parte del Gobierno del Estado y que además, mencionaron ya no escucha las demandas de la sociedad duranguense. Ante el cierre a la circulación de vehículos de la calle Constitución, la anulación de cajones de estacionamiento en la vía pública, la eliminación de las áreas de carga y descarga y la crisis, los negocios están "tronando", expresaron. Juan José Rosas uno de los afectados y a nombre de cerca de 80 comerciantes, dijo que el gobierno jamás se ha acercado para dialogar acerca de las modificaciones que se están implementando en el centro de la ciudad, incluso mencionó que pidieron una audiencia con el Gobernador del Estado a fin de presentarle sus inquietudes, sin embargo, no sólo no los recibió el pasado martes 16 de agosto, sino que ese mismo día por la madrugada a modo de "gandaye", comenzaron a levantar el pavimento de la avenida 5 de Febrero. Comentó que no hay un estudio del impacto ambiental que va a originar la obra en mención, y por supuesto no se tiene previsto el impacto socioeconómico negativo que se vislumbra desde este momento, ya que varios negocios han comenzado a despedir a sus empleados. "Los establecimientos están tronando, porque la gente ya no viene a comprar y no tiene dónde pararse", expresó, al tiempo que hizo ver la reducción de personas en negocios de mucho arraigo como la Chocolatería Schroeder, el Zocabón y ahora el cierre de estacionamientos que daban el servicio a quienes venían al centro. En este sentido hizo referencia al estacionamiento que se encuentra en esquina de Constitución, con Callejón de Las Mariposas, que está destinado a desaparecer y echar a la calle a sus 6 empleados. Agregó que la segunda etapa del Corredor Constitución no tienen razón de ser, ya que precisamente en ese tramo entre 5 de Febrero y Constitución no existen locales y no se puede poner ningún negocio. "Sólo las cantinas van a prevalecer con la calle así, y nosotros o yo que rento departamentos, no hay opción para nuestros negocios", fustigó. A esta protesta se están sumando todos los comerciantes de la calle Constitución de la primera etapa, quienes van a exigir a la autoridad abra la vialidad al flujo de vehículos, aunque sea de lunes a viernes. Por último el afectado dijo que si el gobierno sigue con este tipo de arbitrariedades, condena a los comerciantes duranguenses de mucho arraigo a sucumbir; "Por lo tanto si no nos hacen caso, estamos dispuestos a cerrar todos, el Centro Histórico", advirtió. Dudamos esto termine bien.