sábado, 11 de diciembre de 2010
El Niño de la Calle En “boca cerrada no entran moscas” Sí me llaman voy, no le saco. No me escudo en lo realizado por familiares. “Lo que importa es lo aportado”
Por Loomizqui.-
“La generación del fracaso” me encuentro en la situación de ser uno de los muchos que buscan esforzadamente mejorar la imagen de México en el extranjero. No quiero ni queremos que le vaya mal a nuestro presidente Lic. Felipe Calderón Hinojosa, como sí lo desean militantes del PRI, el PRD y morralla incluyendo a los del PAN ni quiero que su fracaso signifique una alternancia para volver a lo de antes……. Su antiguo PRI el de mis abuelos, de nuestros antepasados, pero eso es historia, renovarse o morir, cuánta razón le asiste a tan ilustre columnista. A quien con ansia e esperado, la segunda parte y ultima, del artículo, en El Siglo de Durango. “Mejor no me llamen” de Alberto Terrones González, cierto los grandes Duranguenses Don José Ramón Valdez y Alberto Terrones Benítez, a quienes la historia ya reconoció y reconocerá por sus aportaciones en bien de nuestro México los dos grandes luchadores por nuestro México e iniciadores de la lucha por los ideales del Partido Revolucionario Institucional en Durango. Pero parece que se olvido, algo muy importante, a tan “ilustre articulista” Los descendientes lucharan por los ideales del padre, abuelos y madre. Por desconocer la trayectoria del columnista me atrevo a escribir lo anterior, sin que esto sea una agresión. La razón lo asiste al señalar la descomposición de los partidos políticos, el señala únicamente a el de “su Abuelo” Yo le agrego que son todos y no tengo abuelo famoso, como él. Una característica señalada es la descomposición de los políticos de hoy, Le aclaro, la actitud de los políticos de ayer hoy y siempre, será lo mismo de cualquier color, llámese como se llame, o lleve el apellido ilustre de Terrones, Salinas, Fox o Benítez eso no es garantía, lo demás vale “Madre” La excepción hace la regla, pero este Niño de la calle, agarra parejo dijeron que todos coludos o todos rabones y cada quien habla como le fue en su santo.